La línea de espumosos de Mosquita Muerta Wines, propiedad de Familia Millán, se convirtió en una de las más elegidas del país gracias a su frescura, calidad y precio accesible. Con una nueva imagen y propuestas que van desde el Extra Brut hasta un innovador Spritz, la marca pisa fuerte dentro y fuera de Argentina.
30 de septiembre de 2025
Redacción Central
En Mendoza, tierra de grandes vinos, Mosquita Muerta Wines encontró un punto de equilibrio entre estilo, frescura y precio con su colección de espumosos Cordero con Piel de Lobo, que hoy marca tendencia en hogares, bares y restaurantes de todo el país. Lo que comenzó como una apuesta se transformó en la línea más fuerte de la bodega, con gran aceptación también en mercados como Brasil y Estados Unidos.
El portfolio incluye cuatro etiquetas bien definidas: Dulce, Extra Brut, Demi Sec y Spritz. Cada una responde a diferentes momentos y paladares, pero todas comparten la misma filosofía: burbujas finas y persistentes, elaboradas bajo el método Charmat, con base de Chardonnay, Semillón, Chenin y Pedro Giménez. “La clave está en la calidad del vino base y en trabajar con dedicación desde la viña. Buscamos frescura, aromas frutales y elegancia, pero sin perder un estilo descontracturado”, explica Gustavo Sánchez, enólogo de la bodega.
La imagen también acompaña este crecimiento: las botellas de Cordero con Piel de Lobo lucen un rediseño que incluye mejoras en tapón, etiquetas y presentación, reforzando el concepto joven y contemporáneo de la marca.
En cuanto a las etiquetas, el Extra Brut despliega notas de flores blancas, ananá y lima, con paso fresco y elegante, ideal para acompañar platos o brindar. El Dulce y el Demi Sec se distinguen por su suavidad y carácter frutal, perfectos para postres o sobremesas distendidas. La gran novedad es el Spritz, de color salmón brillante y un perfil aromático con botánicos y un sutil amargor que lo vuelve irresistible para los atardeceres con hielo y cítricos.
Todos ellos se comercializan con un precio sugerido de $9.300, lo que refuerza la excelente relación entre calidad y accesibilidad que explica el fenómeno. En palabras del enólogo, se trata de vinos “para disfrutar sin complicaciones, pero con toda la identidad del terroir mendocino”.
Así, Cordero con Piel de Lobo se consolida como una propuesta fresca, versátil y elegante que acerca la experiencia del buen espumoso a un público cada vez más amplio.
El próximo 14 de noviembre, la capital neuquina se suma por primera vez a la celebración federal que rinde homenaje al vino argentino. Degustaciones, maridajes, descuentos y recorridos urbanos invitan a descubrir el carácter patagónico de cada copa.
La bodega mendocina fue distinguida con el Premio Oro Internacional en Prácticas Sustentables por la red Great Wine Capitals. Un reconocimiento que celebra la unión entre ciencia, naturaleza y hospitalidad, y posiciona a la Argentina en el corazón del turismo del vino global.
Del 14 al 16 de noviembre, la ciudad será punto de encuentro de cocineros y amantes del sabor criollo. Más de 40 stands y un campeonato con cuatro categorías rendirán homenaje a la diversidad de empanadas argentinas, desde la neuquina de chivo y hongos hasta la tradicional tucumana de Famaillá.
Un vino nacido del encuentro entre dos mundos: Lui Wines, desde el corazón mendocino, y Acclaimed Wine Company, de Napa Valley. Alta Plata Malbec encarna la fusión entre la frescura de los Andes y la elegancia californiana, en una creación conjunta que celebra la amistad, la precisión y el arte del vino.
Neuquén se prepara para levantar sus copas en la quinta edición de Confluencia de Cervezas, un encuentro que reunirá más de 20 cervecerías, música en vivo y propuestas gastronómicas en el Parque Jaime de Nevares. Habrá además un tour cervecero para quienes deseen adentrarse en el corazón de las fábricas artesanales.
